¿Padres de un niño con probable ansiedad?, descúbrelo
Un gran número de niños en el mundo está experimentado, cada vez con mayor frecuencia, estados de ansiedad.
Cuando la relación mente-cuerpo no es armónica, debido a factores internos o externos que producen emociones displacenteras, sentimientos negativos o impactos emocionales de estrés, inevitablemente el organismo genera respuestas emocionales o conductuales que se manifiestan como síntomas o enfermedades psicosomáticas, una de las más comunes es la ansiedad y un gran número de niños en el mundo la experimenta con mayor frecuencia.
La ansiedad en niños
Desde muy temprana edad los seres humanos nos enfrentamos con diferentes retos que pueden producirnos estados de ansiedad. Durante los tres primeros meses de vida, el recién nacido establece una relación de dependencia casi total con su madre; si se dan irregularidades en esta convivencia vital y las necesidades del bebé no son cubiertas o son tensas, pueden generar padecimientos en la psique del infante.
A lo largo de las diferentes etapas de crecimiento durante la infancia, los seres humanos nos enfrentamos con diferentes retos a superar para alcanzar una personalidad concreta, un carácter emocional determinado y un patrón de conducta que nos permita relacionarnos e interactuar con la gente que nos rodea, e incluso se aprende a controlar nuestras emociones e instintos para poder ser incluidos en un nivel de normalidad. Esta situación de prueba constante puede provocar situaciones de estrés en niños al grado de provocar cambios drásticos en la conducta.
Y, sin embargo, pocas veces consideramos que un infante puede estar seriamente preocupado o estresado, no nos detenemos a pensar que al igual que los adultos, los niños pueden desarrollar pensamientos particulares caracterizados por ser exagerados, irracionales, negativos, difíciles de controlar y los haga experimentar ansiedad.
¿Cómo distinguir a un niño con ansiedad?
La ansiedad en niños pequeños puede manifestarse a través de señales físicas, emocionales y de comportamiento, a continuación, se enlistan las más comunes.
Señales de ansiedad emocionales:
- Llanto excesivo.
- Irritación o enojo frecuentes sin razón aparente.
- Temor a cometer errores, incluso pequeños.
- Ataques de pánico.
- Preocupación por el futuro.
- Temor de que lo dejen en algún lugar.
- Pesadillas constantes.
Señales de ansiedad físicas:
- Dolores frecuentes de estómago o de cabeza sin razón aparente.
- Falta de apetito en ausencia de sus padres.
- Se muestra inquieto, distraído o ambas cosas.
- Tiembla o suda en situaciones estresantes.
- Frecuentemente se encuentra tenso.
- Tiene problemas para dormir o permanecer dormido.
Señales de ansiedad en el comportamiento:
- Se muestra poco participativo en círculos sociales.
- No muestra interés o se niega a ir a la escuela.
- Se muestra estresado o huraño si se ve obligado a interactuar con otras personas.
- Tiene episodios de crisis o berrinches frecuentes.
- Constantemente busca la aprobación de sus padres.
Es importante que los adultos a cargo, no resten importancia a las anormalidades que detecten en la actitud, la sociabilidad y el desarrollo del infante. Para establecer un diagnóstico preciso, el psicólogo deberá tomar en consideración desde factores genéticos, pruebas clínicas, estado de salud generalizado y hasta análisis del medioambiente familiar en el que el niño se desarrolla, antes de poder considerar un caso de ansiedad y un tratamiento adecuado.
Referencias informativas: